Los estrategas de UBS Alejo Czerwonko, Gabriela Soni y Laura Assis recordaron que el proceso formalmente comienza el 1 de octubre de 2025, cuando se abre un periodo de consulta de 90 días

Ciudad de México. El Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) continuará como pilar de integración regional más allá de 2026, pero enfrentará una revisión larga y polémica, que podría derivar en condiciones más restrictivas para el país, estima el banco suizo UBS en su más reciente análisis de inversión en México.

“A pesar del potencial de volatilidad, el alto grado de integración norteamericana y el beneficio mutuo hacen improbable, en nuestra opinión, una ruptura total. Seguimos creyendo que el T-MEC perdurará, aunque posiblemente con condiciones más estrictas para México y Canadá”, se lee en el reporte de la oficina principal de inversiones difundido este lunes.

Los estrategas de UBS Alejo Czerwonko, Gabriela Soni y Laura Assis recordaron que el proceso formalmente comienza el 1 de octubre de 2025, cuando se abre un periodo de consulta de 90 días.

En tanto, para enero de 2026, la Oficina del Representante Comercial de EE.UU. (USTR) deberá presentar al Congreso un informe con los objetivos de la revisión, según sus leyes.

Aunque el tratado no prevé una renegociación completa, el reporte sostiene que declaraciones recientes de funcionarios estadounidenses -incluido el secretario de Comercio, Howard Lutnick- sugieren que Washington podría acercarse a las conversaciones con ambiciones más amplias.

El análisis también afirma que el anuncio de un arancel del 30 % sobre bienes mexicanos “fue sorprendente”, sobre todo, al considerar el enfoque “constructivo” de México en las negociaciones.

Asimismo, detalla que el Gobierno mexicano estima que un 87 % del comercio con EE.UU. se beneficia de protecciones del T-MEC, mientras que autoridades estadounidenses sitúan la cifra cerca del 75 %.

No obstante, resalta que el arancel promedio efectivo sobre las exportaciones mexicanas a EE.UU. es ahora de entre 7 % y 8 %, por debajo del 15 %, el mínimo para la mayoría de los países a los que se ha impuesto esta nueva tarifa.

“En resumen, México continúa disfrutando de una posición comercial relativamente favorable, en gran medida debido al T-MEC», señalan los especialistas.

Inversión sensible a la incertidumbre comercial

En este contexto, los analistas de UBS advirtieron que el sentimiento de inversión en México se ha debilitado, toda vez que la inversión extranjera directa ha disminuido de forma constante desde principios de 2024.

“Para México, la prioridad será un enfoque estratégico y reflexivo: preservar lo que funciona, modernizar donde sea necesario y utilizar la revisión para impulsar la inversión y la certidumbre a largo plazo”, añade el reporte.

Asimismo, los estrategas de UBS consideraron que la posición de México como principal socio comercial de EE.UU. sigue respaldando la fortaleza del peso, pese a posible volatilidad, y anticiparon que el tipo de cambio se ubique en 18,8 pesos por dólar al cierre de 2025.

Asimismo, el informe apunta que los bonos soberanos mexicanos denominados en dólares estadounidenses siguen cotizando con diferenciales más amplios que otros bonos con calificación BBB, lo que refleja la persistente preocupación por reformas internas y la incertidumbre comercial.

El pasado viernes, la firma global Oxford Economics indicó en un reporte que el eventual aumento de los aranceles, una subida del 25 % al 30 % de Estados Unidos a México «no tendrá un gran impacto en el comercio», siempre y cuando se mantengan las exenciones para los productos del T-MEC y el contenido automovilístico estadounidense.