Una polémica estrategia de enseñanza ha desatado un intenso debate en redes sociales luego de que se difundiera un video grabado en una escuela de educación básica en China.
En las imágenes, se observa a un adulto disfrazado como “el hombre de la bolsa” ingresar a un aula y ofrecer dulces a los alumnos; en el que, aquellos que aceptan son “secuestrados” simbólicamente: el actor los carga en brazos y los saca del salón ante la mirada atónita del resto.
Esta dinámica, replicada en varios grupos escolares, busca concientizar a los menores sobre el peligro de aceptar objetos de desconocidos. La reacción de los niños ha generado controversia: algunos lloran, otros entran en pánico, y todos parecen visiblemente alterados; Sin embargo, en una segunda ronda de simulación, ninguno de los estudiantes acepta los dulces, lo que ha sido interpretado por algunos como una señal de que el mensaje fue efectivo.
Las opiniones en internet no se hicieron esperar. Mientras unos celebran el impacto del método “Traumatizados pero seguros”, escriben. Otros lo califican de excesivo y emocionalmente agresivo para los menores; a frase que más se ha repetido en los comentarios resume el sentir general: “Puedes cuestionar sus métodos, pero no sus resultados.”
Este tipo de ejercicios, conocidos como “pedagogía de choque” o “enseñanza de impacto”, no son nuevos, pero sí poco comunes en ambientes escolares. Abren una discusión más amplia sobre los límites entre educar y exponer a los niños a situaciones que podrían afectar su estabilidad emocional.
Fuente: El Imparcial