Continúan las acciones de control y monitoreo para evitar la propagación del gusano barrenador del ganado en el país
Redacción / La Voz de Michoacán
Morelia, Michoacán. - Aunque en Michoacán no se han reportado casos del gusano barrenador el riesgo es latente debido a la naturaleza voladora de la mosca. Por ello, las autoridades hacen un llamado a los productores a seguir los protocolos sanitarios establecidos y a participar activamente en las campañas de prevención para proteger la ganadería local.
El médico Francisco Carrillo Calderón, director de Ganadería de la Secretaría de Agricultura de Michoacán, informó que continúan las acciones de control y monitoreo para evitar la propagación del gusano barrenador del ganado en el país.
De acuerdo con Carrillo Calderón, se han detectado cerca de 1,400 casos de gusano barrenador en el sureste del país, todos bajo control. Informó que se han implementado rigurosas estrategias de vigilancia, incluyendo inspecciones en tránsito y en destino, así como la obligación de los transportistas de ganado de detenerse en casetas de verificación para revisión de documentos y del estado sanitario de los animales.
Explicó que la movilización del gusano ocurre principalmente a través de animales infectados que son transportados sin las medidas sanitarias adecuadas. Sin embargo, la mosca adulta también puede desplazarse por sí sola hasta 20 kilómetros, y si es arrastrada por el viento, puede recorrer distancias mayores, lo que facilita su propagación a nuevas zonas.
Además, señaló que se ha puesto en marcha la liberación masiva de moscas estériles en los estados del sur y sureste, como Veracruz, Morelos, Oaxaca y Chiapas. Esta estrategia busca cortar el ciclo reproductivo del gusano, ya que cuando las moscas hembras se aparean con machos estériles, no se producen huevecillos viables.
El funcionario federal subrayó la importancia de que los ganaderos mantengan una vigilancia constante sobre sus animales, especialmente sobre heridas abiertas y ombligos frescos en animales recién nacidos, que son los puntos más susceptibles a infestaciones.
“El control es efectivo si los ganaderos atienden de inmediato cualquier herida; curar las lesiones es clave para evitar el desarrollo del gusano”, puntualizó.
El gusano barrenador fue detectado por primera vez en México en septiembre de 2024 en el estado de Chiapas, tras haberse identificado previamente en la frontera entre Panamá y Colombia en 2023.
Una larva que se desarrolla a partir de los huevos depositados por una mosca en heridas abiertas de animales de sangre caliente, incluyendo bovinos, porcinos, equinos, e incluso seres humanos.
Este parásito se alimenta de tejido vivo durante aproximadamente siete días, luego cae al suelo para completar su ciclo y transformarse en mosca adulta en un periodo total de 22 días.
Desde la declaratoria de emergencia sanitaria nacional en 2024, las autoridades federales, estatales, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano trabajan de manera coordinada para contener el avance de esta plaga.