La mujer estuvo encerrada por 19 años tras ser injustamente acusada del secuestro y asesintato del hijo de Isabel Miranda de Wallace.
Con 4 votos a favor y 1 en contra, la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia ordenó la liberación “inmediata y absoluta” de Juana Hilda González, mujer quien fue acusada falsamente hace casi 20 años del secuestro y asesinato de Hugo Alberto Wallace, hijo de la ya fallecida empresaria y activista, Isabel Miranda.
Durante la sesión ocurrida este miércoles, el alto tribunal concedió a la mujer un amparo por violaciones al proceso debido que las pruebas clave del caso fueron obtenidas mediante tortura y amenazas en un contexto de arraigo, como lo argumenta la defensa del Instituto Federal de Defensoría Pública (IFDP)
“Se está ordenando la inmediata y absoluta libertad de la quejosa se instruye a la Secretaría de Acuerdos para que, por los medios más eficaces y expeditos, se notifique esta determinación a la autoridad penitenciaria correspondiente”, indicó la presidenta de la Primera Sala, Loretta Ortiz.
Ante eso, se declaró nula su declaración, así como cualquier otra prueba derivada que viole sus derechos humanos.
Para la IFDP, este caso está exigiendo que la justicia federal debe de actuar de manera constitucional y de acuerdo a los derechos humanos a la hora de procesar a las personas, sin importar la gravedad del delito imputado.
“El fallo pone de relieve algunas de las violaciones más persistentes del sistema penal tradicional —como la obtención de pruebas bajo tortura, las violaciones al derecho de defensa y el uso de estereotipos y prejuicios de género en la valoración judicial de la prueba— que aún mantienen a miles de personas sujetas a proceso penal en el ámbito federal”, informá la insitución.
Juana Hilda González Lomelí fue detenida en enero de 2006 tras ser acusada del secuestro y asesinato de Hugo Alberto Wallace, quien desapareció el 11 de julio de 2005 mientras se encontraba en Plaza Universidad junto con otras personas.
Días después, su madre, Isabel Miranda de Wallace, reportó el secuestro ante la Procuraduría General de la República (PGR), señalando que había recibido una llamada por los presuntos secuestradores pidiendo una cantidad grande de dinero.
Posteriormente, la activista denunció Juana Hilda González Lomelí, Brenda Quevedo Cruz, Jacobo Tagle Dobín, César Freyre Morales y los hermanos Albert y Tony Castillo Cruz, por ser los presuntos responsables del secuestro de su hijo. De igual manera, los acusó de hablerlo asesinado y descuartizarlo en un departamento de la capital.
En el caso de Isabel, “reconoció” en ese entonces su participación en el delito, por lo que fue arrestada. Posteriormente, fue sentenciada en abril de 2011 a 78 años de prisión por el delito cometido.
Sin embargo, mientras estaba recluida en las instalaciones de la PGR, la mujer confesó haber sido torturada y amenazada para que se declarara culpable del secuestro y asesinato de Hugo. Pese a ello, la Fiscalía General de la República insistió en dejar a Hilda en prisión.
Se espera que en las próximas horas Juana salga en libertad del Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) CPS 16 femenil de Morelos, donde actualmente se encuentra, para posteriormente volver a reunirse con su familia. Mientras tanto, se espera que los demás implicados del crimen tengan la misma resolución que ella.
Fuente: El Universal