Agencias / La Voz de Michoacán

Moscú, Rusia. El vicepresidente del Consejo de Seguridad y expresidente de Rusia, Dmitri Medvédev, ha analizado qué logró Estados Unidos con su ataque nocturno contra tres instalaciones nucleares de Irán, enumerando 10 consecuencias de la ofensiva en una publicación en sus redes sociales este domingo.

En primer lugar, según el alto funcionario ruso, la infraestructura crítica del ciclo nuclear de Irán parece no haber sufrido daños o haber sufrido daños menores.

Como segundo punto, Medvédev señala que el enriquecimiento de materiales nucleares, “y ahora podemos decirlo directamente, y la futura producción de armas nucleares”, continuará pese a los bombardeos.

En tercer lugar, la entrada de Estados Unidos al conflicto hace que "una serie de países estén dispuestos a suministrar directamente a Irán sus armas nucleares".

Incrementar la ofensiva contra Irán hace que Israel siga bajo ataque, “las explosiones resuenan y la gente está en pánico”.

Como quinto punto, Estados Unidos ahora se ve arrastrado a un nuevo conflicto con perspectiva de operación terrestre.

En sexto lugar, "el régimen político de Irán se ha preservado y es muy probable que se haya fortalecido".

Esta ofensiva, en séptimo lugar, hace que "el pueblo iraní se esté consolidando en torno al liderazgo espiritual de Jamenei, incluso aquellos que no simpatizaban con él".

Como octavo punto, Donald Trump, pese a que llegó al poder como un presidente pacificador, ya inició una nueva guerra para Estados Unidos.

En noveno lugar, la gran mayoría de los países del mundo están en contra de las acciones de Israel y Estados Unidos. Aunque en este punto, Medvédev no mencionó que también esa mayoría de países se ha opuesto a la ofensiva rusa contra Ucrania.

Finalmente, ironizó al decir que, "con tanto éxito, Trump nunca verá el Premio Nobel de la Paz, incluso con toda la venalidad de esta nominación".

Medvédev concluyó su evaluación comentando que es un "buen comienzo". "¡Felicitaciones, señor presidente!", ironizó.

Los ataques estadounidenses contra las instalaciones nucleares en Fordo, Natanz e Isfahán fueron llevados a cabo la madrugada de este domingo. "¡Ha llegado la hora de la paz!", dijo Trump al anunciar la ofensiva. El mandatario de Estados Unidos tomó la decisión a unirse al operativo de Israel a pesar de que antes de convertirse en presidente, prometió que acabaría con todas las guerras.

Ante la ofensiva, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, dio las gracias a Trump, afirmando que "la paz nace de la fuerza".

No obstante, Teherán, en repetidas ocasiones, ha negado que busque desarrollar una bomba atómica y ha indicado que su programa nuclear solo tiene fines pacíficos.

Tras el aumento de hostilidades, numerosos políticos y líderes mundiales han condenado las acciones de Washington, calificándolas de "peligrosa escalada" y "acto criminal".