Alfredo Soria/ACG – Morelia, Michoacán

Concebido como un punto de encuentro vecinal para fomentar la convivencia, el Corredor Cultural Independencia, en la colonia Obrera, está fuera del radar de autoridades.

Lo que un día fue una zona de convivencia vecinal, hoy atraviesa un evidente deterioro. Alguna vez fue un ejemplo de recuperación de espacio público hoy luce descuidado, con grafitis en muros y aparatos para hacer ejercicio, basura, pasto seco y zonas donde la hierba ha crecido sin control.

El Corredor Cultural, creado en la colonia más antigua de Morelia, fundada a finales del Siglo XlX, hoy desde distintos puntos del área se leen carteles elaborados por los propios vecinos que buscan generar conciencia entre quienes lo utilizan.

“Si comes aquí, de favor llévate tu basura. Este espacio es de todos, cuídalo” o “Favor de no tirar basura o serás consignado y exhibido”. Sin embargo, hay oídos sordos al clamor del vecindario.

Una vecina que prefiere mantener el anonimato exhibe que “la iluminación es deficiente”. Comenta además que con frecuencia ha encontrado rastros de que se han quemado objetos o basura en el sitio, aunque reconoce que el lugar ha estado en peores condiciones.

También propone que deberían darle mantenimiento a ese espacio y plantar más pasto y árboles.

Irving, que también vive en esa zona, comparte que el corredor “está muy descuidado y necesita mantenimiento urgente; la falta de alumbrado eficiente lo vuelve inseguro por las noches”.

En tanto, Jorge opina que “es lamentable ver cómo se ha deteriorado este espacio. Las autoridades deberían estar más al pendiente, pero también nosotros, los vecinos y quienes venimos aquí, debemos cuidarlo y mantenerlo limpio”.

El Corredor Cultural Independencia, que nació de la transformación de un lote baldío para promover la convivencia en la histórica colonia Obrera, hoy refleja la falta de mantenimiento institucional y la urgencia de recuperar los espacios públicos como lugares vivos y seguros para la comunidad.